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Desde el pasado año, la forma en la que celebramos las festividades ha cambiado debido a la pandemia de COVID-19. Y este año, la víspera de Navidad no será una excepción, ya que la Iglesia Journey en la ciudad de Nueva York ha anunciado que su servicio navideño se llevará a cabo de manera exclusivamente en línea.
Con la intención de proteger a sus feligreses y evitar cualquier posible propagación del virus, la Iglesia Journey ha tomado la difícil decisión de cancelar su celebración presencial el 24 de diciembre. Esto significa que miles de personas que solían reunirse en su edificio para dar la bienvenida a la Navidad, se unirán a través de la transmisión en vivo desde la comodidad y seguridad de sus hogares.
Esta noticia ha sido recibida con sentimientos encontrados por parte de los seguidores de la Iglesia Journey. Por un lado, comprenden y apoyan la decisión de priorizar la salud y el bienestar de todos. Sin embargo, también expresan una ligera tristeza al no poder participar en persona en uno de los eventos más esperados del año.
A pesar de la situación, la Iglesia Journey ha asegurado a sus fieles que se esforzarán para que la experiencia virtual sea tan especial y significativa como la presencial. Para ello, han preparado una ceremonia cuidadosamente planificada, llena de música alegre, mensajes inspiradores y momentos de reflexión, todo ello transmitido en tiempo real a través de sus plataformas digitales.
Además, para mantener viva la tradición y el espíritu navideño, la Iglesia Journey también ha anunciado la creación de paquetes especiales para que las familias puedan disfrutar de la experiencia en casa. Estos paquetes incluyen velas, guías de oración y otros elementos simbólicos que permitirán a los fieles sentirse más conectados con la comunidad incluso a distancia.
La decisión de la Iglesia Journey refleja el compromiso que muchas instituciones religiosas han asumido para adaptarse a los nuevos tiempos y mantener a salvo a sus seguidores. Aunque la forma de celebrar la Navidad ha cambiado, el mensaje de esperanza y unidad permanece intacto.
Es importante recordar que, aunque este año las festividades puedan ser diferentes, la verdadera esencia de la Navidad no se encuentra en los edificios o en las celebraciones presenciales, sino en el amor y el espíritu de solidaridad que todos podemos compartir, independientemente de nuestra ubicación física. Que este tiempo especial sea una oportunidad para reflexionar sobre lo que realmente importa y para mantenernos unidos en estos tiempos difíciles.