
origen de la imagen:https://www.wabe.org/atlanta-based-chick-fil-a-backtracks-from-its-no-antibiotics-in-chicken-pledge/
La cadena de comida rápida Chick-fil-A con sede en Atlanta retrocede en su promesa de no usar antibióticos en el pollo
La famosa cadena de restaurantes Chick-fil-A ha anunciado que ya no cumplirá con su promesa de no utilizar antibióticos en el pollo que sirve en sus establecimientos. La compañía con sede en Atlanta ha dado marcha atrás en esta política, que había sido implementada en 2014 como parte de un compromiso con la salud y el bienestar de sus clientes.
Según un comunicado de la empresa, la decisión de volver a permitir el uso de antibióticos en el pollo se debe a preocupaciones sobre la disponibilidad de suministros de aves de corral que cumplan con los estándares de la cadena. Chick-fil-A aseguró que seguirá monitoreando la situación y trabajando con sus proveedores para garantizar que el pollo que sirve a sus clientes sea seguro y de alta calidad.
La noticia ha generado controversia entre los consumidores y defensores de la salud, quienes critican a Chick-fil-A por dar marcha atrás en su compromiso con la salud pública. Algunos clientes han expresado su descontento en las redes sociales y han llamado a boicotear la cadena de restaurantes.
Por el momento, Chick-fil-A ha declarado que continuará evaluando su política sobre el uso de antibióticos en el pollo y buscará formas de garantizar la seguridad y calidad de sus productos. La compañía ha reiterado su compromiso de servir alimentos frescos y saludables a sus clientes, pero ha reconocido que la disponibilidad de aves de corral criadas sin antibióticos es un desafío en la industria alimentaria.