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TERROR EN LAS CALLES DE CHICAGO: OFICIAL DE POLICÍA FUERA DE SERVICIO ES BALEADO DURANTE UN INTENTO DE ROBO DE AUTO
Chicago, IL – Un oficial de policía de Chicago fuera de servicio fue baleado el pasado jueves por la noche mientras intentaba evitar que un grupo de delincuentes robarta su automóvil.
El incidente ocurrió en el vecindario de Ashburn, cuando el oficial, cuyo nombre no ha sido revelado, regresaba a su hogar después de su turno. Según las autoridades, el oficial fue interceptado por un grupo de individuos sospechosos en la cuadra 2400 de West 89th Street.
Según fuentes cercanas, los sospechosos intentaron robar el vehículo del oficial armados con armas de fuego. En el intento de evitar el robo, el oficial se enfrentó a los delincuentes, lo que desencadenó un intercambio de disparos.
El extenso tiroteo alarmó a los residentes del vecindario de Ashburn, quienes llamaron de inmediato al 911 para reportar la situación de peligro que se estaba desarrollando en sus calles.
Cuando los refuerzos policiales llegaron al lugar del incidente, los sospechosos ya habían huido de la escena. Se cree que los delincuentes abandonaron el área a pie, dejando atrás al oficial herido.
El oficial de policía fue trasladado de inmediato a un centro médico cercano, donde se encuentra en condición estable después de sufrir una lesión en el torso.
El Departamento de Policía de Chicago ha lanzado una cacería intensa para dar con el paradero de los sospechosos. Además, se ha solicitado la colaboración ciudadana para que brinden cualquier información que pueda ayudar a esclarecer este acto de violencia.
Este incidente es solo el último ejemplo de la creciente ola de violencia que azota la ciudad de Chicago en los últimos meses, donde los tiroteos y los casos de carjacking se han vuelto cada vez más frecuentes.
Las autoridades locales han expresado su preocupación ante esta escalada de violencia, y han prometido redoblar esfuerzos para garantizar la seguridad de los residentes y controlar la delincuencia en la ciudad.
A medida que se desarrolla la investigación, los residentes de Ashburn y Chicago en general están bajo alerta máxima, conscientes de la importancia de estar atentos y reportar cualquier actividad sospechosa para contribuir a un ambiente más seguro y tranquilo en las calles de la ciudad.