origen de la imagen：https://www.fox5ny.com/news/nyc-community-fridges-food-waste
En la ciudad de Nueva York, una iniciativa basada en la solidaridad y la lucha contra el desperdicio de alimentos ha ganado popularidad. “NYC Community Fridges” (neveras comunitarias de Nueva York) se está convirtiendo en una solución creativa para combatir el problema del hambre y el desperdicio de alimentos en la Gran Manzana.
Esta iniciativa utiliza refrigeradores públicos ubicados en las aceras de distintos barrios, donde la gente puede donar comida, alimentos no perecederos y bebidas para que otros los recojan de forma gratuita. Estos refrigeradores comunitarios están asegurados y adornados con coloridos murales, lo que los hace fácilmente reconocibles.
Según un artículo de Fox 5 News, los creadores de “NYC Community Fridges” fueron inspirados por la falta de acceso a alimentos frescos y saludables en muchos vecindarios de la ciudad. Establecieron el primer refrigerador comunitario en la primavera de 2020 y desde entonces han surgido más de 60 en toda la ciudad.
El objetivo principal de esta iniciativa es combatir el desperdicio de alimentos y ofrecer un apoyo directo a las personas que lo necesitan. Muchos neoyorquinos han aplaudido esta idea y han comenzado a donar alimentos, al tiempo que también se involucran en la organización y cuidado de los refrigeradores.
La pandemia de COVID-19 ha agravado la situación de muchas familias y comunidades en toda la ciudad, aumentando la demanda de alimentos. Los “NYC Community Fridges” han demostrado ser una solución efectiva para ayudar a las personas a sobrellevar este difícil período, ofreciendo una alternativa confiable para satisfacer sus necesidades básicas.
Sin embargo, esta iniciativa no está exenta de desafíos. El control de la calidad y frescura de los alimentos, así como el mantenimiento y limpieza de los refrigeradores, son tareas fundamentales que requieren la colaboración de la comunidad. Afortunadamente, muchos voluntarios se han unido para garantizar que los alimentos sean seguros y accesibles para todos.
Además, “NYC Community Fridges” está trabajando en colaboración con organizaciones locales y empresas para recibir donaciones regulares y garantizar un flujo constante de alimentos frescos y saludables.
A medida que estos refrigeradores comunitarios siguen multiplicándose, se espera que más comunidades se beneficien de esta iniciativa solidaria. El problema del desperdicio de alimentos y la inseguridad alimentaria están siendo abordados de manera activa por la gente de la ciudad de Nueva York, demostrando que la solidaridad y el trabajo conjunto pueden marcar la diferencia en la lucha contra la pobreza y el hambre.
