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El Río ícono de la comunidad LGBTQ+ celebra su exitosa fiesta de la danza lesbiana “Mango”
San Francisco, California – En una noche llena de energía y celebración, la famosa locación LGBTQ+ El Río se convirtió en el epicentro de la diversión y la camaradería el pasado sábado, durante la emocionante fiesta de la danza lesbiana “Mango”.
El evento, organizado por un grupo de mujeres lesbianas locales, atrajo a una multitud entusiasta que vino a disfrutar de una noche en la que el amor, la música y la comunidad fueron los protagonistas.
Desde tempranas horas de la noche, las puertas de El Río abrieron para dar paso a los asistentes ansiosos por disfrutar de una noche de baile y emociones. Los organizadores del evento se encargaron de crear un ambiente seguro y acogedor para que mujeres lesbianas, bisexuales y transgénero pudieran expresarse libremente sin juicio.
En el interior del club, las paredes estaban decoradas con luces brillantes y carteles coloridos que anunciaban la fiesta de la danza lesbiana “Mango”. La pista de baile vibraba al ritmo de DJ Jazzy, una talentosa discjokey local que estaba encargada de mantener a los asistentes en movimiento durante toda la noche.
Entre risas y abrazos, las asistentes se entregaron al ritmo de la música, compartiendo espontáneamente sus talentos de baile y dejando que las canciones icónicas de artistas lesbicas como Tegan and Sara, Ladyhawke y Hayley Kiyoko las llevaran a través de una noche mágica.
Además de la música, la fiesta también contó con performances en vivo de talento local. Entre los actos destacados de la noche se encontraba un grupo de bailarinas que presentaron una energética coreografía, celebrando la diversidad y el amor por todas las formas de sexualidad.
“Esta fiesta es un espacio seguro y libre de prejuicios que celebra a las mujeres lesbianas de nuestra comunidad”, afirmó Adriana Molina, una de las organizadoras del evento. “Nos enorgullece crear esta plataforma donde todas puedan ser ellas mismas y unirse en celebración”.
En una noche en la que el amor se palpaba en el aire, la fiesta “Mango” fue un éxito rotundo. La multitud desbordante de felicidad y empoderamiento dejó claro que esta celebración anual ícono de la comunidad LGBTQ+ continuará creciendo y prosperando en los años venideros.